16 de marzo de 2014

La Gonorrea se vuelve residente a todos los antibióticos.

Los antibióticos están dejando de funcionar con los tipos de gonorrea más comunes.

El Centro de Control de Enfermedades Infecciosas de EE UU advierte de que la gonorrea se resiste a los antibióticos y está muy cerca de ser imposible de tratar.
En las últimas décadas han aumentado los casos y las variedades de infección.
Los investigadores creen que la gonorrea actual no es la misma, que ha mutado.

La gonorrea, también llamada blenorragia, blenorrea y gonococia, es una enfermedad de transmisión sexual que, entre otros efectos, causa ardor, hinchazón testicular, aumento de flujo vaginal y comezón en el ano. Hasta ahora se utilizaban antibióticos como las penicilinas o las tetraciclinas, pero los científicos vienen observando que los antibióticos ya no funcionan con los tipos de gonorrea más comunes.

Ha sido el Centro de Control de Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos quien ha advertido de que la gonorrea es cada vez más resistente a los antibióticos, por lo que está muy cerca el día en que sea imposible de tratar. Actualmente se están usando, además de penicilinas y tetraciclinas, la cefalosporina (vía intravenosa), la azitromicina o la doxicilina (en pastillas).

Desde hace dos años, los científicos venían advirtiendo de esta posibilidad. De hecho, en las últimas décadas ha aumentado considerablemente la cantidad de personas que contraen gonorrea y las variedades de infección. Los investigadores creen que la gonorrea actual no es la misma que atacaba antes, que ha evolucionado.

Es lo normal en bacterias y microorganismos, que muten con el tiempo. La gonorrea ha mutado y ha creado cepas más resistentes a los antibióticos hasta el punto de ser inmune ya a casi cualquier tratamiento.

Ocurre que a mayor resistencia se dan más casos de gonorrea. En Estados Unidos, el CDC advierte que cuando un paciente no se cura por completo y la infección persiste, esto la hace más potente.

Todo ello lo acaba de poner de manifiesto un nuevo estudio. Los científicos vigilaron entre 1991 y 2006 los casos de gonorrea en 17 ciudades de Estados Unidos. Lo que detectaron fue que la gonorrea se había vuelto resistente al ciprofloxacino. Un 10% de las muestras fueron resistentes a los tratamientos habituales. Además, aseguran los autores que en poco tiempo el nivel de resistencia aumentará un 7% más.

Sarah Kidd, del CDC, asegura que en EE UU “la aparición y propagación de una cepa resistente a cefalosporinas es inminente". De hecho, la dosis en el tratamiento de la gonorrea ha tenido que ir aumentando, pero según Kidd llegará el momento en que no sea suficiente.

FIEBRE: 20MINUTOS. ES